lunes, 15 de febrero de 2010

"Lucha y nunca sobrevivirás... Corre y nunca escaparás...".


La verdad es que este fin de semana ha estado repleto de películas tremebundas, una a la que me resistía y ha acabado fascinándome es Ciudad de Dios... una tremenda cinta brasileña que narra la vida de las bandas de jovencísimos delincuentes que campan a sus anchas en los barrios y favelas de los alrededores de Río.

Personajes como Ze Pequenho (Dadinho), Buscapé o Bené te llegan muy dentro, me recuerdan a varios personajes de The Wire. Dirigida por Fernando Meirelles en 2002 y basada en un libro de 1997 de Paulo Lins basado en una historia real de la guerra entre Ze Pequenho y Mané Galinha... tiro va, tiro viene, barbaridad por aquí, desastre por allá en un lugar sin ley, con una policía de tebeo metida de lleno en la corrupción más absoluta y donde acabas sintiendo que la vida de la gente tiene poca o ninguna importancia. Escalofriantes momentos rodados con un realismo meridiano, dirección de tiralíneas aparentemente loca (pero medidísima), argumentos y tramas entrecruzadas en un apasionante viaje que, aunque de largo metraje, se te hace brevísimo pero denso como un expresso italiano. Filme candiadato por Brasil al Oscar 2003 pero finalmente no nominado.... demasiado crudo para los sensibles estómagos angelinos me supongo.... la escena de la ejecución de uno los chavales de la banda de los ratones la clasifico como extrema y brutal... película para ver con calma y respeto.

5 comentarios:

Juan Royo Abenia dijo...

mañana fuster en el roncal!

aliorrala18 dijo...

esa película es cruda pero buena! y el desenlace siempre me deja un mal sabor de boca saludos!

Antonio Saz dijo...

lo que no consiga Juanito Royo....

Ali, esta peli no podría acabar de otra manera, no crees?.... por lo menos Buscafe tiene un futuro por delante....

Anónimo dijo...

Para mi, ésta es la mejor película que he visto en mi vida.

Esta película consiguió provocarme una sensación que ninguna otra película ha conseguido en mi vida.

Cuando la vi por primera vez, yo sentía que estaba dentro de la película, que esta allí, es algo raro de explicar. Nunca me ha pasado eso con ninguna otra película.

Además, otra cosa brutal de la película que no juzga a nadie, simplemente narra los hechos tal como son, sin juicios de ningún tipo, lo que hace que la película sea todavía más realista.

Antonio Saz dijo...

Anónimo, eso es cine, eso se llaman emociones, me alegro que te haya gustado tanto. Un saludo

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